fbpx

La alimentación idónea para el ser humano

La alimentación idónea para el ser humano

Soy Fran Romero, Naturópata y director de Naturfor (escuela de vida natural), una de las cuestiones sobre la que más me piden orientación las personas que me solicitan ayuda natural, tanto en consulta presencial como en la opción de consulta telefónica es la alimentación adecuada para mantener o recuperar la salud.

Todos sabemos la famosa frase de Hipócrates (el padre de la medicina) , de hace 25 siglos, y que sigue siendo tan cierta como el primer día que la dijo hace 2.500 años: “Que tu alimento sea tu medicina, que tu medicina sea tu alimento”, Incluso yo me atrevería a decir que esta frase hoy en día tiene mucho más valor que en los tiempos de Hipócrates, debido a los cambios tan negativos que la sociedad de nuestros días ha originado en el tipo de alimentación para el ser humano.

Por desgracia, a pesar de los grandes avances tecnológicos en el campo de la salud, vivimos en la sociedad más enferma de todos los tiempos, y no me lo estoy inventado yo, solo hay que ver los estudios de población respecto a la salud, vivimos más años que en siglos anteriores, pero eso no significa que esos años los vivamos con plena salud, al contrario, se han disparado en forma de pandemia muchas enfermedades como la diabetes, problemas cardiovasculares, asma, artrosis, ansiedad, depresión, y sobre todo cáncer.

Si intentamos buscar el origen del gran deterioro actual de la salud en nuestra sociedad, varios pueden ser los factores detonantes, pero sin duda uno de los más importantes es el tipo de alimentación. Ludwig, un filósofo alemán, en 1850 acuño otra famosa frase respecto a la alimentación: “Somos lo que comemos”, y que razón tenía, el cuerpo humano necesita un combustible en concreto para poder realizar de forma correcta todas las funciones de nuestro metabolismo.

Y lo que personalmente nunca he llegado a entender es como el ser humano con toda su supuesta inteligencia, seamos capaces de proporcionar el combustible adecuado para según que motor disponga nuestro   coche (diésel o gasolina) y nunca se nos ocurriría proporcionarle un combustible distinto del adecuado a nuestro vehículo,  y sin embargo a nuestro propio motor (el metabolismo humano) le estemos proporcionando diariamente alimentos erróneos para su buen funcionamiento.

Pero si estudiamos un poco más el origen de este error tan grande que estamos cometiendo en nuestra sociedad actual, podemos llegar a la conclusión que en realidad no tenemos toda la culpa, simplemente hemos caído en las redes de una campaña de desinformación orquestada desde hace muchos años por las grandes industrias alimenticias, cuyo objetivo no es la salud de la humanidad, sino los intereses económicos de cada una de esas empresas de alimentación.

Para engañar a un ser humano solo se necesitan tres cuestiones básicas, una es evitar que tenga la información correcta sobre el tema, otra es ofrecerle algo que le produzca placer, y por último generarle comodidad, el ser humano es el animal más cómodo de este planeta, si nos ofrecen comodidad, nos evitan trabajo, nos gusta lo que nos ofrecen y nos ocultan la verdadera información, caemos en el engaño. Y en estos principios es en los que se han basado las grandes industrias alimenticias de comidas elaboradas, rápidas, refinadas, con larga duración de conservación y repletas de azúcar, la droga más placentera para el ser humano.

Una vez descubierto el origen de nuestra equivocación, debería de ser fácil enmendar nuestro error, pero hay un tema que dificulta la posibilidad de volver a alimentarnos correctamente, y es la falta de información verdadera sobre la buena alimentación. En los últimos siglos, generación tras generación, hemos crecido aprendiendo un tipo de alimentación errónea para el ser humano, incluso nos la han enseñado en las escuelas, y a formado parte de la pirámide oficial mundial de la alimentación, por ello es tan difícil volver a tomar las riendas de nuestra propia alimentación correcta, sin dejarnos influenciar por intereses externos.

La única forma de volver a alimentarnos de una forma correcta, es olvidándonos de todo lo que hemos aprendido sobre alimentación de nuestros padres (que no tienen la culpa, nos han trasmitido lo que ellos han aprendido en la sociedad actual), olvidándonos de todo lo que hemos aprendido de alimentación en el colegio y sobre todo olvidándonos de todo lo que hemos aprendido de alimentación en la televisión y los medios de comunicación, y empezar un nuevo plan de formación alimenticia, desde el conocimiento real del funcionamiento de nuestro metabolismo y desde la información correcta del tipo de combustible que necesitan nuestras células para vivir y no enfermar en el intento.

Por ello te invito a conocer la dieta en la que me baso para ayudar a las personas que me solicitan orientación en materia de alimentación, bien porque tienen un problema de salud o bien porque quieren prevenir enfermedades con los alimentos. Este tipo de alimentación es la “Dieta Dental”, basada en estudios científicos sobre los alimentos idóneos de cada especie animal según la composición de su dentadura.

Con este método sencillo pero muy eficaz, podemos saber los porcentajes adecuados de cada tipo de alimentos (cereales, verduras, legumbres, frutas, semillas, hortalizas, proteína animal, etc…), para cada especie y sobre todo para la especie que más nos interesa que es el Ser Humano. Déjame ayudarte a volver a aprender a alimentarte correctamente.

Solicita en el Centro Naturfor una consulta de orientación nutricional y juntos ordenaremos y equilibraremos tus hábitos de alimentación de una forma correcta y natural.


					

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies
Abrir chat